RESUMEN

La presencia de un trastorno de ansiedad se asocia a una mayor frecuencia de pensamientos y conductas suicidas.

Dados los altos costos personales y sociales de las conductas suicidas, la prevención del suicidio es una prioridad.

Comprender los factores presentes en los individuos con trastornos de ansiedad que aumentan el riesgo de suicidio puede dar información sobre los esfuerzos de prevención.

Los objetivos del presente estudio eran examinar la prevalenciade ideación y conducta suicida, así como los factores asociados con el riesgo de suicidio en pacientes con trastornos de ansiedad en atención primaria. Se analizaron los datos de un ensayo a gran escala controlado aleatorizado para evaluar la prevalencia de ideación y conducta suicida, así como los factores asociados con el riesgo de suicidio.

Los resultados revelaron que la ideación y la conducta suicida eran relativamente comunes en este grupo.

Al examinar de manera conjunta los factores de salud mental y física, la presencia de depresión, un deterioro mental relacionado con la salud y el apoyo social; cada uno de ellos únicamente justificaba la varianza en la puntuación de riesgo de suicidio.

Las limitaciones metodológicas incluyen la recogida transversal de datos y la falta de información sobre los trastornos comórbidos de la personalidad. Por otra parte, los pacientes incluidos eran de un ensayo clínico con criterios de exclusión que pueden limitar la generalización.

Los resultados destacan los complejos determinantes de la conducta suicida y la necesidad de una evaluación de suicidio más matizada en esta población, incluyendo la evaluación de la comorbilidad y el funcionamiento general.

INTRODUCCIÓ

Las estimaciones globales indican que cada año hay entre 10-20 millones de intentos de suicidio y un millón de suicidios consumados (Organización Mundial de la Salud, 1999). Los intentos de suicidio son costosos en términos de interrupción laboral e interpersonal (Fundación American para la Prevención del Suicidio, 2009).

Por lo tanto, la comprensión de las características y de los correlatos de suicidio es un asunto crítico de salud pública.

Uno de los retos en el estudio del suicidio es la relativamente baja tasa base de intentos y de suicidios completados, observados en la mayoría de las poblaciones.

Así, puede obtenerse información valiosa estudiando los factores que se asocian con un mayor riesgo de suicidio.

La ideación suicida y los intentos de suicidio pasados se asocian con riesgo futuro de intentos de suicidio y terminaciones (Harris y Barraclough, 1997; Kessler et al., 1999; Kuo et al., 2001; Joiner et al., 2003; ten Have et al., 2009).

Por lo tanto, el estudio de este tipo de pensamientos y comportamientos puede aumentar nuestra comprensión de quién es probable que intente o complete un suicidio, informando potencialmente del manejo del riesgo de suicidio y de los esfuerzos de prevención.

La presencia de trastornos de ansiedad actuales o de por vida, incluyendo el trastorno de pánico (TP), la fobia social (FS), el trastorno de ansiedad generalizada (TAG), y el trastorno de estrés postraumático (TEPT), se asocia con un mayor riesgo de suicidio (Khan et al., 2002;. Cougle et al., 2009a, b; Nepon et al., 2010; Nock et al., 2010; López-Castroman et al., 2011).

Las personas con trastornos de ansiedad muestran un aumento de ideación suicida (Sareen et al., 2005a) y de tasas de autolesiones (Chartrand et al., en prensa) y intentos de suicidio más frecuentes (Bolton et al., 2008; Sareen et al., 2005a, b) que aquellos sin trastornos de salud mental.

Por esta razón, la comprensión de los factores asociados con el riesgo de suicidio en personas con trastornos de ansiedad es fundamental para la gestión de esta población.

A pesar del aumento del riesgo de suicidio en pacientes con trastornos de ansiedad, los determinantes específicos de riesgo dentro de este grupo son poco conocidos.

Los estudios de las personas con trastornos de ansiedad específicos, incluyendo TP, FS y TEPT indican que la presencia adicional de depresión y de trastornos por consumo de drogas aumenta el riesgo de suicidio (Noyes et al., 1991; Lepine et al., 1993; Warshaw et al., 1995; Warshaw et al., 2000).

La gravedad y los aspectos de deterioro funcional también están relacionados con el riesgo de suicidio en pacientes con trastornos de ansiedad.

Por ejemplo, la gravedad del síntoma de ansiedad se asocia con un aumento de la ideación e intentos suicidas en pacientes con TP y TEPT (Noyes et al., 1991; Freeman y Moore, 2000; Huang et al., 2010).

También están documentados las asociaciones entre el riesgo de suicidio y el deterioro en el funcionamiento general en el TEPT (Tarrier y Gregg, 2004; Panagioti et al., 2011) y el funcionamiento social, tanto en el TEPT como en el TP (Noyes et al., 1991; Huang et al., 2001; Panagioti et al., 2011).

Sin embargo, pocos estudios en pacientes con trastornos de ansiedad representan integralmente los trastornos mentales y las condiciones de salud física y el deterioro que pueden estar asociados con el riesgo de suicidio (véase Freeman y Moore, 2000, para una excepción).

La alta comorbilidad de los trastornos de ansiedad y los problemas de salud física (Maier y Falkai, 1999; Levinson et al., 2008; Castro et al., 2009; Nicolson et al., 2009) sugiere que la relación entre la salud física y el suicidio en esta población precisa consideración.

Los factores de salud física asociados generalmente con el riesgo de suicidio incluyen dolor (Braden y Sulliven, 2008;. Ilgen et al., 2008), cronicidad de patologías médicas (Goodwin et al., 2003; Bartels et al., 2007; Robson et al., 2010) y la limitación funcional debido a las condiciones físicas (Kaplan et al., 2007; Park et al., 2010).

Por lo tanto, nuestro objetivo era examinar la posible contribución de estos factores, junto con otros predictores establecidos, a las tendencias suicidas en personas con trastornos de ansiedad.

La atención primaria es, por diversas razones, un ámbito importante para examinar los correlatos de riesgo de suicidio en pacientes con trastornos de ansiedad.

La ansiedad y los trastornos de salud física comórbidos se presentan a menudo en la asistencia primaria (Serrano-Blanco et al., 2010), y los pacientes con trastornos de ansiedad a menudo son diagnosticados y tratados en los centros de atención primaria (Schulberg, 1995; Bijl y Ravelli, 2000; Price et al., 2000; Shear y Weisberg et al., 2007).

Por otra parte, muchos individuos que eventualmente se suicidan acuden a la atención primaria semanas o días antes de hacer un intento de suicidio (Luoma et al., 2002).

El conocimiento de los factores potenciales de riesgo podría mejorar la gestión del riesgo en este entorno, alertando a los proveedores de las características críticas de los pacientes que puede ser propensos a intentar suicidarse.

Dada la gran carga social y económica asociada con el suicidio y su relativamente alta prevalencia en atención primaria, se justifica el examen de las características de las conductas de riesgo de suicidio en este ámbito.

El presente estudio examinó las variables de riesgo de suicidio en una muestra de personas con uno
o más trastornos de ansiedad, derivados desde atención primaria como parte de del estudio Coordinated Anxiety Learning and Management (CALM) (Roy-Byrne et al., 2010).

El objetivo primario del presente estudio era examinar primero la prevalencia de ideación y conductas suicida en un gran grupo de individuos reclutados en el ámbito de la atención primaria.

En segundo lugar, se trató de analizar qué factores clínicos se asociaban con riesgo de suicidio en estos pacientes.

Para ello, examinamos análisis correlacionales y de regresión de los factores previamente documentados de estar asociados con el suicidio (incluidas las variables salud mental y física, así como el apoyo social), y la puntuación de riesgo de suicidio.

Para seguir leyendo este artículo, descárguese el pdf adjunto.