Editorial
Contacta y te asesoraremos
Editorial
En este número de final del año 2002 y comienzos del 2003, lo dedicamos a los sectores más peligrosamente cercanos al consumo.
Niños y adolescentes son factores de estudio constante, y atajar la epidemia, desde la evaluación temprana en el aprendizaje, entorno familiar o factorial, no supone un reto para intervenir lo antes posible y detener el consumo en esta franja social, los jóvenes especialmente vulnerables.
En el artículo sobre Abuso de sustancias en los adolescentes y la intervención en consulta dispone de datos alentadores en la medida en que se dan pautas eficaces para la mejora ambulatoria de la recogida de datos, en la evaluación de la situación y la exploración de la información de los jóvenes y adolescentes según las edades.
Este adelanto en la intervención se traducirá en un diagnóstico más preciso para que no se nos escapen detalles significativos y podamos hacer frente a la deshonestidad que se produce a menudo.
Creo que los cuadros del artículo son esclarecedores y explican de manera didáctica detalles significativos. También describen factores de riesgo.
Hablamos, como siempre, de diferentes sociedades la americana y la española, pero salvando las estadísticas concretas, estamos ante una dinámica y una tendencia muy similar y por tanto significativas. En ese sentido los factores de riesgo allá y aquí se superponen.
En el artículo sobre Estructura familiar versus relaciones familiares como predictores de consumo está basado en un informe en el que significativamente muestra la influencia en los hábitos consumidores de los padres y su influencia en los hijos.
Así, la consideración por parte del niño de que la madre tenía un problema con el alcohol, éste puede ser el mayor y/o único predictor del consumo/abuso del hijo.
Las diferentes circunstancias sociales que se describen, provocan en ocasiones que las necesidades emocionales de los chicos no sean satisfechas y, por consiguiente supongan una fractura importante en el adolescente.
No hablamos de todos los sectores de la comunidad afro americana en este caso pero si de variables a tener en cuenta como referencia. Debemos por tanto eliminar los prejuicios políticamente correctos en cada caso, sean conservadores o progresistas para abordar la realidad con la neutralidad necesaria sin etiquetas.
Contacta y te asesoraremos
Formulario Contacto
C/ Anglí, 54, 08017 Barcelona – España